El jueves santo es un día especial para poder reflexionar sobre el amor,
caminar juntos en el amor y la familiaridad, luchando por una crianza y
enseñanza de fe llena de respeto y amor. Ser parte del amor de Jesús
requiere sentirse amado por Él, sus muestras de amor se manifiestan
en acciones concretas como el lavatorio de los pies a aquellos que
caminan con Él, una entrega de servicio lleno de humildad, sencillez y
amor.