Día 8 Novena al Espíritu Santo

Temor de Dios: amar con respeto

Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Padre nuestro…

Oración por los siete dones del Espíritu Santo

Oh, Señor Jesucristo,
que antes de ascender al cielo prometiste enviar al Espíritu Santo
para completar tu obra en las almas de tus Apóstoles y discípulos,
dígnate concedernos el mismo Espíritu Santo para que Él perfeccione en nuestras almas
la obra de tu gracia y de tu amor.

Concédenos:

el Espíritu de Sabiduría para aspirar a lo eterno,

el Espíritu de Entendimiento para abrazar tu verdad,

el Espíritu de Consejo para caminar con rectitud,

el Espíritu de Fortaleza para resistir en la lucha,

el Espíritu de Ciencia para reconocerte en todo,

el Espíritu de Piedad para amarte filialmente,

y el Espíritu de Temor de Dios para vivir con humildad y reverencia.

Sella, Señor, nuestro corazón con tu Espíritu,
y anímanos a seguirte con alegría. Amén.

Cita Biblica

“El temor del Señor es el principio de la sabiduría;
prudencia de los que lo practican:
la alabanza de él permanece eternamente.”

Salmo 111,10 

El Don de Temor de Dios

El don de Temor de Dios no es miedo a un castigo ni terror frente a un juez severo. Es reverencia amorosa, es un profundo respeto nacido del amor, que nos lleva a no querer alejarnos de Dios porque lo amamos tanto, que no soportamos la idea de herir su Corazón.

Este don nos pone en una actitud de humildad y confianza. Nos recuerda que Dios es santo, inmenso, y también cercano. Nos invita a caminar con cuidado, no por obligación, sino por amor. Es el temblor del que ama profundamente, el asombro del que se sabe en presencia de lo sagrado.

“El temor de Dios es un don que nos hace conscientes de la grandeza de Dios, pero no nos aleja: nos acerca más. Nos hace pequeños, pero no por vergüenza, sino por amor.”

Este don también nos protege del orgullo, del egoísmo, del pecado que endurece el alma. Nos hace más sencillos, más atentos, más agradecidos. Quien vive este don no se encoge de miedo, se abre con humildad al amor.

Reflexión

¿Sabes qué es hermoso del don de Temor de Dios?
Que nos recuerda cuánto valemos para Él.
No se trata de tenerle miedo…
sino de amarlo tanto que no queremos fallarle.

Es como cuando quieres mucho a alguien y cuidas tus palabras,
no por obligación, sino porque no soportarías lastimar su corazón.
Así es este don:
una ternura que nos hace caminar con más amor y respeto.

A veces vivimos tan rápido, tan distraídos, que olvidamos lo esencial.
Hoy, el Espíritu quiere ayudarte a volver al centro,
a recuperar el asombro, la humildad, la sensibilidad para lo sagrado.

No necesitas ser perfecto, solo abrir el corazón y decirle:
“No quiero vivir lejos de Ti.”
Y Él lo hará todo nuevo.

Petición del día

Espíritu Santo,
dame el don de Temor de Dios.
Hazme humilde, reverente,
capaz de reconocer tu presencia
en cada persona, en cada instante.
Que nunca me aleje de Ti por indiferencia,
sino que viva siempre con respeto y amor.

Oración Final

Ven, Espíritu de Temor de Dios,
enséñame a caminar con humildad,
a vivir con conciencia,
y a tratar lo sagrado con cuidado.

Que tu presencia me asombre cada día,
y que mi vida sea respuesta agradecida a tu amor.

Todos:

María Auxilio de los Cristianos

Ruega por nosotros.

Amén.

¡Compártelo en tus redes sociales!

Facebook
Twitter
Pinterest
WhatsApp
Email
error: Contenido protegido